Ya no hay aventuras, solo parodias

Sentía atracción por lo que uno llama tipos fracasados, dijo. Pero, ¿qué es, dijo, un fracasado? Un hombre que quizás no tiene todos los dones, pero sí muchos, incluso bastantes más que los comunes en ciertos hombres de éxito. Tiene esos dones, dijo, pero no los explota. Los destruye. De modo, dijo, que en realidad destruye su vida.

Después Tardewski volvió a hablar de esa cualidad destructiva, de esa rara lucidez que se adquiere cuando se ha conseguido fracasar lo suficiente. Porque otra de las virtudes del fracaso, dijo, es que nos enseña que nunca nada deja su huella en el mundo.

Se que simplemente por la necesidad constante defenderse puedo llegar a volverse tan débil que no pueda ya defenderse.

Todos queremos, le digo, tener aventuras. Renzi me dijo que estaba convencido de que ya no existían ni las experiencias, ni las aventuras. Ya no hay aventuras, me dijo, sólo parodias.

Vine a este pueblo hace más de 30 años y desde entonces estoy de paso. Estoy siempre de paso, soy lo que se dice un ave de paso, sólo que permanezco en el mismo lugar.

Ricardo Piglia. Respiración artificial (extracto) (2006)

Quiero decir, en realidad, es cierto que nunca nos pasa nada. Todos los acontecimientos que uno puede contar sobre sí mismo no son más que manías. Porque a lo sumo ¿qué es lo que uno puede llegar a tener en su vida salvo dos o tres experiencias? Dos o tres experiencias, no más (a veces, incluso, ni eso).

Ricardo Piglia.
Respiración Artificial (1980)

El último lector

Hay una foto donde se ve a Borges que intenta descifrar las letras de un libro que tiene pegado a la cara. Está en una de las galerías altas de la Biblioteca Nacional de la calle México, en cuclillas, la mirada contra la página abierta.

Uno de los lectores más persuasivos que conocemos, del que podemos imaginar que ha perdido la vista leyendo, intenta, a pesar de todo, continuar. Esta podría ser la primera imagen del último lector, el que ha pasado la vida leyendo, el que ha quemado sus ojos en la luz de la lámpara. `Yo soy ahora un lector de páginas que mis ojos ya no ven.´

Un lector es también el que lee mal, distorsiona, percibe confusamente. En la clínica del arte de leer, no siempre el que tiene mejor vista lee mejor.

Ricardo Piglia. El último lector (2005)